Herencia medieval: medicina cientifica y popular

Durante la colonia y tal como en el mundo medieval, se pasaron sin modificar teorias y practicas de la medicina.
Dentro de la medicina cientifica se encontraba aun la teoria griega del estado de las cosas: sequedad, humedad, frio y calor; las enfermedades eran atribuidas a un exceso o falta de estas cualidades y los medicamentos tenian por objeto restablecer el equilibrio. Los remedios mas usados eran las purgas, las ventosas, las pociones, los emplastos, las cauterizaciones, las sangrias e infusiones diversas. En los ejercitos conquistadores, Hernan Cortes disponia de dos barberos-boticarios (los barberos eran los que practicaban las sangrias principalmente, tenian en su barberia una pecera en la cual guardaban a las sanguijuelas, de hecho los colores de una barberia son el azul y el rojo y este representa la sangre) y de un tercer soldado que ensalmaba y santiguaba las heridas. Para cauterizar las heridas los soldados usaban un hierro caliente o aceite hirviendo.
El remedio considerado mas eficaz en Nueva España, era el ensalmo, el cual es una combinacion de medicamentos y formulas magicas. Desde siglos atras en el norte de España, quienes curaban asi eran los llamados "saludadores", aplicaban un preparado hecho de aceite, miel , tocino crudo, ceniza, pelos de perro, y otros ingredientes acompañado de palabras magicas y de palpamientos de las partes adoloridas.

Para los casos de envenenamiento se consideraba infalible el cuerno de unicornio, aunque nadie logro obtenerlo, se aseguraba en el siglo XVI que en el pico de Orizaba pastaban unicornios.
Otro remedio era el Bezoar, fue muy eficaz y socorrido, que habia quien vendia piedras haciendolas pasar por bezoares. Estos podian ser del tamaño de un puño y solian encontrarse en las vias digestivas y urinarias de algunos mamiferos. Se encontraban en varios rumbos de la Nueva España y podian tener efectos inesperados. Se encontraron en las entrañas de una cabra en los montes cercanos a Oaxtepec, tambien hay testimonios de su abundancia en Yucatan.
Se recomendaba su uso para conciliar el sueño, para ayudar al parto, para remediar la melancolia, los males del corazon, detiene la calentura y la diarrea, remedio tambien para los envenenamientos y ataques epilepticos.

La medicina popular son nociones derivadas no de la ciencia sino del folklore, que aun sobreviven como el mal de ojo, el empacho, el espanto y la caida de la mollera. La idea del mal de ojo era el resultado de hechicerias malignas, se creia que ciertas personas, generalmente las mujeres, poseian en los ojos un poder malefico que produce enfermedades en el organismo del niño. C omo este mal es inducido magicamente se debe tambien recurrir a la magia para remediarlo y se logra gracias a misteriosos movimientos con un huevo, para evitar el mal de ojo es indispensable un amuleto que puede ser el asta de un ciervo asi se evitara desviar la mirada dañina.
El empacho, es un grave trastorno intestinal que afecta tambien a los niños, para curarlo se recomendaba darles cada dos noches tanta mostaza como cabe en una nuez. El espanto, es el mal con que segun la tradicion popular las almas en pena castigan a los vivos.